Casi la mitad del Gordo vendido en Cáceres viajó hasta Brozas el pasado miércoles y repartió 1,2 millones de euros entre 15 vecinos. Cuatro de los diez décimos premiados con 300.000 euros cada uno en la capital fueron a parar a esta localidad cacereña gracias a un vecino que trabaja en una gestoría. Hace una semana compró los cuatro boletos en la administración de loterías número 9 de la capital cacereña, que vendió tres millones de euros del 79.250.

El premio está muy repartido entre familiares y amigos, que ayer aún no se creían que la suerte les haya sonreído por primera vez en este municipio situado a 47 kilómetros de la capital cacereña. El comprador explicó a este diario, pidiendo mantener el anonimato, que había adquirido los décimos en este despacho al que suele acudir habitualmente en el número 10 de la avenida de París.

"Estoy muy contento porque los millones están muy repartidos", apuntó el responsable de que el premio hubiera viajado hasta Brozas, donde su alcalde, José Félix Olivenza, se felicitaba ayer de que el Gordo hubiera visitado por primera vez en su historia este municipio. "No, nunca había tocado aquí y, la verdad, es toda una alegría", reconoció.

Mientras tanto, los agraciados se recuperaban ayer, 24 horas después del sorteo, de la fiesta que organizaron nada más conocer que habían sido premiados con el número grande. "Nos fuimos a celebrarlo y hoy aún estamos asimilándolo", indicaba el comprador, que intercambió con su único compañero de oficina el boleto ganador.

Cuando le llamaron para decirle que había salido el número que llevaban, no se lo creyó hasta que no vio los décimos con sus propios ojos. Ayer insistió en que no querían hacer público quiénes han sido los ganadores y rehusó la invitación de este diario a ser fotografiados.

NUMEROS SUELTOS Preguntado por si fue en busca de un número concreto a la administración, el comprador contestó que le vendieron un número al azar de los que había sueltos en ventanilla. Ni siquiera pidió una terminación concreta.

El día del sorteo de la lotería prefirieron no acercarse hasta la administración de loterías de la avenida de París que regenta la familia Iglesias, a la que ayer tampoco había acudido ningún ganador más, aunque algunos clientes habían comentado que los otros seis décimos ganadores podrían haber sido adquiridos por vecinos del barrio de Cabezarrubia, donde está ubicado el despacho número 9.