Casi el 60% de las 110 muertes violentas que los médicos forenses de la provincia investigaron el año pasado resultaron ser accidentales, y más de la mitad de estas se produjeron en accidentes de tráfico. Lo reflejan los datos de la memoria 2009 del Instituto de Medicina Legal (IML) de Cáceres, de los que también se extrae un dato positivo, que la cifra de fallecidos en accidente de tráfico se ha reducido a más de la mitad en los últimos seis años, al pasar de 77 en el 2004, a 35 el año pasado.

La actividad del IML, tanto la realizada por el servicio de clínica forense --exploraciones e informes de personas vivas-- como por el servicio de patología forense --actuaciones en fallecidos--, sigue aumentando. Así, según ha expuesto recientemente su director, José María Montero, a lo largo del pasado año se emitieron 3.896 informes de personas vivas, 272 más que en el anterior; y los forenses realizaron 163 actuaciones tanatológicas, estudios para determinar las causas y circunstancias en fallecimientos por causas violentas o sospechosas de criminalidad, lo que supuso un aumento de 18 casos con respecto al año anterior.

De estas 163 actuaciones tanatológicas que en casos de fallecidos realizó el año pasado el Servicio de Patología Forense del IML 110 resultaron ser violentas (ocho más que en el 2008); de estas, casi el 60%, un total de 66, fueron muertes accidentales; y más de la mitad de estas, concretamente 35, lo habían sido en accidentes de tráfico. Estos siguen siendo responsables de la mayoría de las muertes violentas accidentales, aunque los datos estadísticos también reflejan que la cifra de estas baja --el año pasado se registraron tres casos menos que en el anterior, de 38 se bajó a 35-- y que el número de fallecidos en estos siniestros también baja.

Lo destaca así la memoria forense, en la que al referirse a la evolución del número de fallecidos en accidentes de tráfico señala que "se debe resaltar que sigue el descenso con respecto a los años anteriores". De 77 fallecidos en el 2004 se bajó a 45 en el 2005, hubo un incremento de tres en el 2006, se bajó de 48 a 29 en el 2007, y tras un importante repunte en el 2008, en que se incrementó en 9 la cifra de fallecidos del año anterior, el año pasado se registró de nuevo una leve disminución de fallecidos en accidente de tráfico, un descenso de tres con respecto al anterior.

MENOS HOMICIDIOS En las muertes violentas que investigan los forenses se engloban, además de las accidentales, las muertes suicidas y las homicidas. Estas últimas supusieron el año pasado tan solo el 1,22% de las muertes objeto de actuación judicial, y en su caso cabe destacar, así lo hizo el director del IML, "la considerable disminución con respecto al año anterior", pues mientras en el 2008 se registraron en la provincia siete homicidios, el año pasado hubo dos, con lo que se volvió a la cifra habitual. "Lo inusual fueron las siete muertes homicidas registradas en el 2008, pues lo normal son una o dos al año".

Y mientras las muertes accidentales y las homicidas descendieron, las suicidas aumentan. El año pasado se registraron 42, las mismas que hace seis años, y ocho más que en el 2008, en que hubo 34. Continúan en estas la tendencia al alza que se viene constatando desde el año 2006, en que hubo 28 muertes suicidas, una menos que en 2007.