Una multa de unos 810 euros será el castigo para un ladrón de coches que no consiguió su objetivo, ya que fue sorprendido por la propia Policía Nacional cuando intentaba sustraer uno en el polígono de Las Capellanías.
El Juzgado de lo Penal lo ha condenado por un delito de robo en grado de tentativa a pagar una multa de cuatro meses y quince días a razón de seis euros diarios.
El procesado, A. A. C., natural de un pueblo de Barcelona y sin antecedentes penales, fue pillado in fraganti por los agentes cuando utilizaba una varilla para intentar abrir el coche, un Citröen BX que se encontraba estacionado en la calle, por la puerta del conductor. El suceso ocurrió por la noche, sobre las 22.35 horas, el 3 de octubre de hace dos años.
Según explica el tribunal, el procesado solo tenía la intención de "llevarse temporalmente el citado automóvil". El coche fue valorado en 700 euros, así que su robo frustrado le costará incluso un poco más al ladrón.
Por otro lado, el mismo tribunal ha condenado a dos hombres y una mujer que se enzarzaron en una pelea en el bar Airbag de Cáceres golpeándose mutuamente por un delito de lesiones, uno de ellos, y tres faltas de lesiones los tres, según una sentencia dada a conocer esta semana.
La bronca se inició porque la mujer, que iba acompañada de su novio, reconoció en el bar al otro individuo con el que había tenido un altercado 15 días antes. Ella se dirigió a él de forma acalorada, iniciándose una discusión. El propietario del bar echó a los tres del establecimiento, pero estos continuaron la discusión comenzando a agredirse entre sí, produciéndose diversas contusiones leves.
