Hace unos meses una joven se sentó en el banquillo por una decena de tuits contra Carrero Blanco. El fiscal pedía dos años de cárcel. La Audiencia la condenó a un año de prisión por lo que consideró «un desprecio y una burla» hacia las víctimas del terrorismo. Este ha sido uno de los casos más mediáticos que rodean al debate sobre la Ley de Seguridad Ciudadana, más conocida como la ‘Ley mordaza’. A esta misma norma tendrá que hacer frente un cacereño por un comentario que compartió en internet sobre los antidisturbios el pasado 1 de octubre.

Alfredo Izquierdo, vecino de Talayuela, recibió esta semana una denuncia de la policía local como respuesta a las declaraciones que vertió en Facebook. El ayuntamiento de Talayuela había instado a través de su perfil oficial de la red social a asistir a una concentración días después del 1 de octubre para mostrar su apoyo a las fuerzas y cuerpos de seguridad del Estado que «velaban» por la situación en Cataluña durante la jornada del referéndum, a lo que el cacereño contestó: «Velando por las hostias como panes totalmente desproporcionadas de descerebrados puestos hasta arriba de cocaína, ouyeah!».

Izquierdo reconoce que el comentario es fruto de la tensión «del momento», pero alega que le enfureció ver las cargas policiales y la violencia que los efectivos estaban ejerciendo contra los manifestantes o los que intentaban depositar su voto en la urna. «No podía permanecer ajeno a lo que estaba pasando», se justifica, mientras argumenta que «fue una respuesta a las imágenes en las que algunos efectivos estaban golpeando a ancianos y a los ciudadanos que se encontraban allí».

El delito al que se enfrenta Izquierdo está tipificado en el artículo 37 de la ley de seguridad ciudadana que hace mención a «faltas de respeto a las autoridades de las fuerzas y cuerpos de seguridad». La infracción por la que le ha denunciado la policía local está recogida como una falta leve y el joven se enfrenta a una multa de 100 a 600 euros.

El cacereño confiesa con sorpresa que el desenlace al comentario es «desproporcionado», añade que ha recibido apoyos de usuarios a través de distintas redes sociales y defiende que las «leyes no pueden servir para callar a las personas».

La de Izquierdo es una de las primeras sanciones relacionada con insultos hacia los cuerpos de seguridad en el 1-O. El balance del Ministerio del Interior sobre actuaciones en materia de protección de la seguridad ciudadana recoge que en 2016 las denuncias por faltas de respeto a las fuerzas de seguridad en la región ascienden a casi 400 -en España alrededor de 20.000-. En Badajoz, solo hay tres denuncias relacionadas con el artículo 37.4 y en Cáceres la cifra asciende a 367.Cabe recordar que a finales de septiembre, otro vecino de Cáceres fue multado por verter insultos en la misma red social contra la policía a la que acusaba de consumir cocaína y prostitución. Hizo estos comentarios bajo un perfil falso en la red. Deberá pagar 724 euros de multa por injurias y calumnias.