Los recientes movimientos en las direcciones locales del PP y PSOE han puesto en la línea de salida a Elena Nevado y a Luis Salaya para volver a repetir como cabeza de lista de los dos partidos que se han alternado al frente de la alcaldía durante los últimos 35 años.

Nevado se pone en la línea de salida de la carrera electoral desde el momento que decide repetir al frente de la presidencia local del PP. Dirige el partido en el ámbito local y el ayuntamiento. En el PP, el alcalde repite en la siguiente elección municipal, salvo que vaya a otro puesto o cargo en otra administración. Otras alternativas, como la de Rafael Mateos, portavoz del gobierno local y con perfil de candidato, se diluyen para 2019. Y aunque siempre estarán en la recámara Laureano León o Cristina Teniente, cargos del PP, cacereños y con bagaje político, la carta que por ahora tiene el partido en la manga es la de Nevado.

Salaya se pone en la línea de partida desde el momento que Belén Fernández asume la secretaría general de la agrupación local del PSOE. En el PSOE hay bicefalia: Fernández en el partido y Salaya en el ayuntamiento. La forma en la que Fernández logró esta semana la secretaría, sin oposición, augura un camino más fácil a Salaya, pero siempre que esto se traslade a la elección del cabeza de lista y no tenga que enfrentarse a otros candidatos por el desgaste que supone una doble elección: las primarias, hace tres años quedó a un puñado de votos de perder con Fernando Solís, y las municipales. El pulso entre dos candidatos para la dirección provincial, entre Miguel Ángel Morales y Rafael Pacheco, al que apoyaban Fernández y Salaya, no se ha repetido en la agrupación local y queda por ver si esto también sucede en el proceso para la designación del candidato a la alcaldía.

En las elecciones de 2019 volverán a ser decisivos el resto de partidos para designar alcalde o alcaldesa. En Cs, a Cayetano Polo parece que el ayuntamiento se le queda pequeño y que tiene sus miras en la política autonómica, por lo que podría haber otro candidato. En CACeresTú (Podemos) la cuestión no es solo la del candidato, sino también si en 2019 volverá a haber dispersión del voto, como pasó en 2015 cuando la suma de los resultados de CACeresTú y de las dos ‘marcas’ de IU dieron 8.600 votos, con los que se podrían haber logrado cuatro concejales, el doble de los que tiene ahora CACeresTú.