El gerente de Canal de Isabel II, Gerardo Díaz, recordó ayer que los trihalometanos son "el más importante" de los problemas y el que más preocupa respecto a la calidad del agua consumida en Cáceres. En ninguno de los últimos análisis que se han realizado se ha superado el índice de 150 microgramos por litro, nivel máximo que marca la legislación sobre la calidad del agua para garantizar que no tiene incidencia en la salud, pero, sin embargo, se ha superado en numerosas ocasiones el índice de 100 microgramos, que será el límite máximo que se fijará en la legislación a partir del 1 de enero del 2009.

Los trihalometanos son sustancias químicas que aparecen en el agua al tratarla con elementos como el cloro o el fluor en el proceso de potabilización.

En el capítulo de inversiones del presupuesto del 2007 se incluyó una partida de más de seiscientos mil euros para reformar instalaciones de la estación depuradora con el fin de introducir cambios en el sistema de tratamiento del agua y poder rebajar el nivel de trihalometanos. Sin embargo ha pasado el año y ni siquiera se ha sacado a contratación la ejecución de la obra.

El gobierno municipal todavía no ha hecho públicas las inversiones que se prevén para el año 2008. Si finalmente se pasa esta actuación para su realización en el ejercicio del año próximo habría que esperar a la aprobación definitiva de los presupuestos, probablemente hasta febrero, a continuación vendría todo el proceso de la contratación y adjudicación de las obras, con un mínimo de un par de meses, y por último la ejecución con el plazo que se haya marcado en el proyecto o el que haya ofertado la empresa que haga la obra.

La Ocu ha incluido en un par de ocasiones a Cáceres entre las ciudades españolas con el nivel de trihalometanos más altos.