La de ayer fue la tercera vez en menos de un año que el recinto que alberga la sede vecinal y las pistas polideportivas de Llopis Ivorra sufre el ataque de los vándalos. El presidente vecinal, Gregorio Talavera, mostró su enfado e indignación y pidió la adopción urgente de medidas que palíen estas situaciones.

Los vándalos, según relató a este periódico el propio Talavera, entraron en el interior del edificio, subieron al tejado del inmueble que alberga la sede de vecinos y rompieron más de 50 tejas. "Las han destrozado. Es una vergüenza. Estamos muy cansados", dijo el líder vecinal.

Aparte de las tejas, también causaron daños en una ventana y aparecieron varios cristales rotos. "Además --añadió Talavera-- la alambrada de las pistas está echa polvo. Las puertas están abiertas, pero aunque estuvieran cerradas ocurriría lo mismo...". El responsable vecinal recordó que el concejal de Deportes, Lázaro García, "nos había prometido poner medidas antivandalismo en las pistas, como tienen otras barriadas de la ciudad, por ejemplo Moctezuma, pero ha pasado el tiempo y aquí no se ha hecho nada. Llevo dos años esperando", sentenció.

MAS POLICIA El responsable de Llopis Ivorra también recordó al concejal de Seguridad Ciudadana, Santos Parra, y al subdelegado del Gobierno, Fernando Solís, la necesidad de que haya presencia policial en el barrio tras estos acontecimientos. "Reclamamos más policía porque no sé donde está la policía", subrayó.

Gregorio Talavera no encontraba ayer motivos para que sucedieran estas cosas. "No sabemos por qué los vándalos se ceban con nosotros. Sólo sabemos que para subirse a los tejados como se suben tienen que gatear muy bien", dijo irónicamente.

La primera vez que se produjeron ataques contra la sede vecinal de Llopis se rompieron 76 tejas, en la segunda ocasión destrozaron 40. "Ha venido un responsable de Iberdrola y se ha quedado asustado", señaló ayer Talavera a modo de ejemplo. "No sé qué buscan. Es simplemente vandalismo por vandalismo", comentó.

El ataque al mobiliario urbano en dependencias vecinales ocurrido en Llopis Ivorra es el tercero que se produce en la ciudad en menos de un mes. El fin de semana del 25 de septiembre también lo sufrieron los barrios de San Francisco y Moctezuma. En el primer caso, explotaron botellas con papel aluminio y químico en las pistas de Fuente Fría, lo que originó daños en las papeleras. En Moctezuma, el muro de un parque apareció tirado en el suelo, con signos de haber sido destrozado por los vándalos.