Torres de oficinas, suelo para empresas y viviendas y dos nuevos bulevares donde en la actualidad hay carreteras y vías del tren. La transformación de Aldea Moret para lograr su integración física, económica y social de esta barriada con el resto de la capital cacereña contempla una ambiciosa actuación que, a vista de pájaro, afectará a 50 hectáreas del sur de la ciudad si el ayuntamiento logra que la Junta de Extremadura dé luz verde al nuevo mapa urbanístico de la ciudad.

La revolución en el diseño del futuro Aldea Moret provocará que esta zona, históricamente descosida del centro por la barrera del trazado ferroviario, cambie por completo su fisionomía actual y se convierta en un polo atractivo para nuevos empresarios y vecinos. "La imprescindible supresión de las vías, ya sea con el traslado o el soterramiento", explica el arquitecto Manuel Herrero, redactor del Plan General Municipal, permitirá que una franja de terreno de dos kilómetros desde el poblado minero hasta la estación de Renfe se transforme en un paseo al estilo de Cánovas.

A ambos lados de este bulevar --un corredor verde que sustituiría a las vías y que serviría para enlazar el edificio de la estación con otros en rehabilitación como el Embarcadero-- se prevé que puedan construirse viviendas, recuperando también espacios muertos , ahora en suelo industrial, con nuevo equipamientos deportivos, culturales, asistenciales o comerciales.

La importancia de esta actuación, planteada como la creación de un doble eje viario que permita la conexión final de Aldea Moret con el centro, da prioridad a los peatones con un túnel para vehículos en la rotonda de Renfe. De esta forma quedaría convertida en una plaza por la que acceder al bulevar y a una nueva avenida urbana, con acerados más anchos y un paseo, en que se transformaría la salida actual a la carretera de Mérida.

"FRENTES COMERCIALES" El desarrollo del plan no olvida a las industrias de ambos lados de esta travesía, de la que desaparecerían los almacenes para crear "frentes comerciales", precisa Herrero, mediante una reordenación de la zona eliminando las cunetas con nuevos acerados, árboles y mobiliario urbano para facilitar el acceso peatonal. La transformación de Aldea Moret también afecta a la avenida de la Constitución, arteria principal del barrio, donde se actuaría en esta misma dirección para que las naves industriales sirvan para nuevos negocios.

A espaldas de estas dos avenidas, por las que circularía el tráfico, estarían las zonas residenciales con vistas al bulevar verde. A pesar de la desaparición del puente de acceso por la N-630, el barrio mantendría el edificio del antiguo silo para otros usos ciudadanos, junto al que se levantarían dos torres de oficinas para completar la oferta dirigida a atraer empresas.