La alcaldesa, Elena Nevado, y el concejal delegado de Infraestructuras, Víctor Bazo, presentaron ayer la solución planificada para la conexión de Junquillo y Macondo, proyecto que también se amplía al barrio de Los Castellanos. A esta presentación seguirán otras en los próximos días, ya que desde el segundo semestre de 2018 y durante 2019 se ejecutarán varias de las actuaciones más destacadas que se proyectaron en el primer año de la legislatura. La nueva conexión vial acercará a los 3.735 vecinos que residen en estos tres barrios, según el análisis de las cifras de población a fecha del pasado 1 de enero.

La solución es la que aparece en el plano. Desde la glorieta del Junquillo saldrán dos viales, uno conectará con la calle doctor Alirio Noguera, en Macondo, mientras que el otro se une a la calle Miguel Serrano, en Los Castellanos. Se ha descartado la conexión directa con la calle Remedios Buendía, en Macondo, por la «pendiente, que es del 16% y no cumpliríamos» con la normativa en materia de accesibilidad, explicó Javier González Suero, técnico del servicio de Infraestructuras del ayuntamiento. Para salvar el desnivel, el nuevo vial va paralelo a doctor Alirio Noguera hasta su conexión con esta calle. Al ir en este tramo en una ladera se proyecta «un muro de contención en la parte de Macondo», apostilló González Suero.

A la presentación del proyecto asistieron directivos de las asociaciones vecinales de Junquillo y de Macondo-Castellanos. José Alberto Iglesias, vicepresidente de Junquillo, confió en que gracias a este nuevo acceso se pueda acortar el recorrido de la línea 4 del autobús urbano para que en todos sus viajes entre en la urbanización del Junquillo, ahora no lo hace en los trayectos en los que el autobús tiene que ir a Valdesalor. Cuando el pasado verano se unieron en un solo recorrido las líneas 4, 9 y 40 no se contemplaba el vial de conexión entre los tres barrios. Si el acceso entre Macondo y Junquillo se realizase por el nuevo vial, afectaría a una de las paradas del actual recorrido, la de la calle Carlos Callejo.

«Estamos satisfechos con este nuevo acceso, que lo veníamos reclamado desde hace años, aunque ya sabemos que las cosas de palacio van despacio», comentó Esperanza Terón, presidenta de Macondo-Castellanos.

A LICITACIÓN / Nevado recordó que la inversión con la que se cuenta para acometer la obra es de 380.000 euros y que probablemente en marzo ya podría salir su ejecución a licitación. La alcaldesa se centró en el Junquillo, el último de los barrios hechos con una ley autonómica que modificaba el plan de urbanismo y que se suma a Ceres Golf (ley de Oferta Turística Complementaria) y a La Cañada, Cáceres el Viejo, Gredos y Residencial Universidad (Ley del Kilómetro). El Junquillo se hizo con un Proyecto de Interés Regional. Nevado recordó que con esta nueva obra y la anterior de un acerado se va conectando este barrio con el resto de la ciudad.

Este año ya se ha ejecutado una obra similar a la presentada ayer. Se trata de la prolongación de la calle Cordel del Merinas, que conecta los dos sectores de Montesol con la ronda norte.

En 2018 se ejecutarán varias de las inversiones más importantes que se presupuestaron en 2016 y comenzarán las principales obras que se cofinancian con fondos europeos. A la presentación ayer de la conexión de Junquillo, Macondo y Los Castellanos seguirá en unos días la reforma de la avenida de Virgen de Guadalupe en el tramo entre Viena y Gil Cordero, obra que ya cuenta con presupuesto (576.000 euros) y con proyecto. La siguiente en darse a conocer será la ampliación del parque del Príncipe, obra que está en licitación por 3,9 millones y cuyo plazo de presentación de ofertas finaliza el lunes 19. También está pendiente la mejora de la calle Alzapiernas con una escalera mecánica. El plazo de presentación de ofertas que ya ha terminado es el del concurso para la mejora de centros turísticos y patrimonio cultural con un importe de casi 3 millones. Finalizó el pasado día 8 y las plicas se abrirán el 21.

La obra que también se presupuestó en 2016 pero que tendrá que esperar es la de la mejora de la conexión de las rondas Vadillo y Matadero con el camino viejo de Sierra de Fuentes, uno de los dos accesos que tiene el Residencial Universidad. El equipo redactor del proyecto había presentado tres soluciones. Dos de ellas contemplaban la construcción de un nuevo ramal paralelo al vial actual y se ajustaban al presupuesto con el que se cuenta (380.000 euros). La tercera proponía la construcción de una glorieta, pero su coste subía hasta los 813.000 euros. El servicio de Infraestructuras del ayuntamiento ha propuesto que se haga la glorieta, dado que se prevé que con la construcción de la ronda este se incremente el tráfico por el camino viejo de Sierra de Fuentes. El servicio planteó que se retrase su ejecución y se haga tras la finalización de la ronda este.