El gran parque de Santa Lucía se completará con la reordenación de la glorieta que supondrá su límite, en el cruce de la avenida de la Constitución y la calle Río Tíber. La Concejalía de Obras tiene previsto centrar esta rotonda, puesto que actualmente entraña un serio peligro para peatones y vehículos (algunos la toman en línea casi recta), y aumentar su diámetro para facilitar la circulación. Además, en el centro se instalarán elementos relacionados con el mundo del ferrocarril, muy adecuados en un barrio familiarizado con el tren desde hace un siglo. Renfe ha donado estas piezas al ayuntamiento: pasos a nivel, tramos de vía, vagonetas en desuso, traviesas antiguas...

En el extremo contrario el nuevo parque limitará con la vía del tren, y también está previsto construir un paso elevado entre las barriadas de La Cañada y Santa Lucía para salvar el trazado ferroviario. Renfe ya ha presentado el proyecto ante el ayuntamiento cacereño, que le ha dado autorización para llevarlo a cabo, aunque de momento no se ha iniciado ninguna actuación en la zona.