La suspensión cautelar de las obras de Mira al Río afecta a un tramo de la calle San Roque, donde estuvo la vivienda número 2 que se derribó esta semana, "que es donde se observa la aparición de los restos", indicó ayer Francisco Pérez Urban, director general de Patrimonio Cultural de la Consejería de Cultura de la Junta, que apuntó que el pasado jueves "de forma verbal" y con un envío de un fax al ayuntamiento se notificaba la paralización puntual de los trabajos en la zona donde ha aparecido la estructura a examinar. Las labores se desarrollaron ayer con normalidad en el resto de la vía que está afectada por el ensanche de Mira al Río y la reordenación de San Francisco.

El portavoz adjunto del gobierno municipal, Francisco Javier Castellano, negó ayer que hubiese habido una paralización y en todo momento se refirió a que se ha procedido a una acotación de la zona donde han aparecido los restos. El edil aseguró que no se ha recibido ninguna comunicación de la dirección general de Patrimonio Cultural.

Ayer por la mañana, en el lugar donde estuvieron los inmuebles dos y cuatro de San Roque, había una zona delimitada en la que ha quedado suspendida de forma cautelar y puntual cualquier tipo de actuación. En este sitio, que está debajo de la torre de los Pozos y de la muralla albarrana, se localizó una estructura de mampostería y cal de grandes dimensiones, resto que provocó que a última hora de la mañana del pasado jueves se decidiese parar los trabajos en esta zona.

Lo que destaca de la estructura localizada es que es anterior a la vivienda número dos de la calle San Roque que la ocultaba, lo que determina que ahora se vaya a estudiar con detenimiento. Francisco Pérez Urban precisó que "por ahora no se tiene más información" y manifestó que el consistorio, como promotor de la obra, procederá a la limpieza de esa zona y a estudiar esa estructura, "y en función de los resultados se evaluará". "Es un elemento de cierta envergadura" y de materiales constructivos "que se presumen preexistentes a las casas", añadió Pérez Urban.

El director general precisó que la función de Cultura es "estar alerta" para que se sea respetuoso "con el patrimonio que conocemos y el que pueda aparecer". Recordó que se trabaja en coordinación con el ayuntamiento y con un seguimiento por parte de un arqueólogo de la dirección.

ACOTAR Y NO PARAR Por su parte, Castellano repitió que no hay paralización. "Lo que sí hay es acotación de la zona" para que el ayuntamiento la estudie "piedra a piedra y grano a grano". Indicó que es pronto para hacer una valoración de lo encontrado y dijo que hay que ser prudentes ya que hasta ahora sólo se puede hablar de "posibles restos".

Por su parte, la portavoz socialista, Carmen Heras, indicó que "se veía venir" que en esa zona se localizarían restos arqueológicos, y añadió que la comisión provincial de Bienes Inmuebles, que se reunió el pasado jueves y que, entre otros asuntos, iba a valorar la repercusión que la obra del ensanche tiene en elementos del patrimonio, consideró que la documentación que se aportaba era improcedente porque faltaba información.

Castellano aseguró que en esa reunión no se emitió ningún informe desfavorable al proyecto. "Eso es falso", subrayó el portavoz adjunto del gobierno municipal, y que lo que se acordó fue solicitar "información complementaria sobre aspectos de terminación de la obra".

Fuentes que participan en la comisión provincial indicaron que no se pudo entrar a valorar con detalle el asunto al carecerse de toda la documentación, aunque sí se estuvo hablando de la obra en Mira al Río aproximadamente durante una hora. Lo que hubo fue "una opinión en contra del proyecto tal y como se presentaba" por faltar información, precisaron, y la resolución se acordará cuando se pueda valorar toda la documentación. Las mismas fuentes indicaron que una de las opiniones que se expusieron fue que el proyecto debía de haberse llevado a la comisión cuando se tramitó la modificación del plan especial.

Castellano también recalcó ayer que el traslado del pilón de San Francisco se realizó con la supervisión del arqueólogo de la dirección general.