Las obras de acceso al santuario de la Virgen de la Montaña y el arreglo del párking en superficie del parque del Príncipe, dos de las actuaciones más destacadas en el arranque del nuevo curso político, comenzarán este mes, según anunció a este diario el concejal de Obras, Joaquín Rumbo. Ambas tienen un periodo de ejecución de cinco meses. La primera, que acometerá la empresa Sebastián Sevilla, está dotada con una inversión de 300.000 euros, la segunda (la del parque del Príncipe) costará 200.000.

El párking, en funcionamiento desde hace varios años, tiene una capacidad para unos 150 vehículos y se asienta sobre unos terrenos de propiedad municipal con acceso por la calle José Luis Cotallo. Ahora el ayuntamiento mejorará esta entrada y asfaltará las plataformas donde se aparcan los vehículos (hasta ahora de tierra).

El aparcamiento es gratuito y supone un alivio para el entorno de Hernán Cortés, uno de los núcleos administrativos más importantes de la capital cacereña por la presencia del edificio Múltiples y de numerosas empresas, organizaciones sindicales extremeñas y el Hospital Provincial. El dinero para acometer esta obra se obtiene de las enajenaciones realizadas por el ayuntamiento antes del verano.

LA CUARTA FASE La otra gran obra del otoño es la de los accesos al santuario de la Montaña, actuación emblemática para el gobierno municipal teniendo en cuenta la significación que para los cacereños tiene la patrona. Fue a finales de los años 90 cuando el equipo de gobierno de Saponi planteó la actuación integral en esta zona, que dividió en seis grandes fases. Las obras comenzaron en la ermita del Amparo y ahora se acometerá la cuarta, una de las más ambiciosas por su dotación presupuestaria y que abarca desde la última curva antes de la llegada al santuario hasta el propio templo.

Esta cuarta fase, igual que el resto, incluye la reposición de acerados, asfaltado e iluminación y una glorieta donde se tiene previsto colocar una escultura de Francisco Paniagua, el anacoreta de Casas de Millán que recorría la comarca con una imagen de la Virgen, implorando limosna para levantarle una capilla. Paniagua construyó una cabaña justo en el lugar donde hoy se erige el santuario de la patrona y fue el artífice de la devoción. La talla que se instalará en la glorieta se encargará a un escultor y la idea es que la financie una entidad financiera, según indicó el concejal de Obras.

La dos últimas fases que quedarían para completar los accesos serían la quinta y la sexta. La quinta es, sin duda, la más complicada y se intentaría abordar en los dos próximos años. En noviembre, Rumbo cifró está obra en un millón de euros (más de 200 millones de pesetas) y consistiría en la construcción de una carretera detrás del santuario --para lo que habrá que expropiar terrenos porque son de titularidad privada y realizar un estudio de impacto ambiental al tratarse de la Sierra de la Mosca--. El objetivo es realizar un aparcamiento de autobuses y un mirador que dominará toda la penillanura trujillano-cacereña (justo en el lugar desde donde Alfonso XIII divisó la ciudad cuando acudió a Cáceres en los años 20 para inaugurar el ferrocarril).

La sexta fase iría desde Fuente Concejo hasta San Marquino y también se realizará con posterioridad, según avanzó el edil de Obras el pasado mes de agosto. En este mismo entorno continúan desarrollándose las obras de Mira al Río y las actuaciones en las calles Caleros, Hornillos, Cuesta del Maestre y sus aledaños.