El concejal de Obras, José Joaquín Rumbo, avanzó ayer que se están estudiando soluciones para el problema de abastecimiento de agua a San Marquino, donde sucesivas averías han dejado sin suministro al vecindario en varias ocasiones durante el último mes. Rumbo anunció a este diario que ya se han dado las instrucciones oportunas para reestablecer la presión de agua necesaria, y que si los estudios lo consideran necesario, la red de conductos que abastece al barrio será renovada "lo antes posible".

Algunas tuberías son de fibrocemento y fueron instaladas hace más de 50 años. Los vecinos aseguran que el agua llega sin fuerza hasta sus viviendas, en la ladera de la Montaña, impidiendo el encendido de los calentadores en pleno invierno. "Tenemos que poner las cacerolas en la cocina para lavarnos", explicaron el pasado martes a EL PERIODICO, cansados de una situación que aseguran que se repite desde hace tiempo, especialmente en las últimas semanas.

REVENTONES Sin embargo, cuando Canal de Isabel II aumenta la presión en la zona, la antigüedad de los conductos provoca rupturas y averías, las más recientes en Miralrío y Concordia, que ha dejado al vecindario largas horas sin agua. El gerente de la empresa concesionaria de abastecimiento, Gerardo Díaz, explicó el martes que su compañía se debate entre mantener la presión o aumentarla.

Rumbo declaró ayer que el agua debe llegar con fuerza a toda la ciudad. "Hoy mismo queremos solucionar el problema y facilitar a San Marquino presión suficiente. Varios tramos de la zona tienen conductos nuevos, pero si es preciso cambiar otros, se hará", dijo. También recordó que algunas viviendas deben renovar las viejas acometidas que dificultan el suministro.