El centro de menores García de Paredes, cerrado el 8 de enero del 2001 por la Junta de Extremadura a raíz de la aprobación de la Ley del Menor, dejará su espacio a un nuevo colegio público que aliviará la masificación que soportan las aulas de El Vivero, centro situado a escasa distancia. La Dirección Provincial de Educación informó el jueves del inicio de las obras, que adaptarán este amplio edificio y su entorno al nuevo uso.

El proyecto, adjudicado a Construcciones González Tovar el 5 de junio por 955.500 euros (158 millones de pesetas), contempla la creación de 18 aulas (6 de Infantil y 12 de Primaria), con capacidad para medio millar de alumnos. "Tendrá equipamientos deportivos, gimnasio, biblioteca y todas las dotaciones necesarias para una enseñanza de calidad", explica Emilia Guijarro, directora provincial de Educación. El plazo de ejecución, doce meses, permitirá su apertura en el curso 2004-2005 si todo marcha según lo previsto. El edificio, de cuatro plantas y un amplio espacio anexo, está situado en la confluencia de la avenida Ruta de la Plata con la carretera Nacional 521.

La construcción de un nuevo colegio público se hace necesaria en esta zona de la ciudad, donde confluyen varios distritos en actual expansión urbanística con familias muy jóvenes. El cierre del centro de menores permitió su cesión a la Consejería de Educación por parte de la Consejería de Bienestar Social, y la puesta en marcha del proyecto. Todavía no se ha decidido el nombre del colegio, que podría mantener o no la actual denominación García de Paredes.

Las aulas de El Vivero soportan una elevada demanda desde hace tiempo. De hecho, la Dirección Provincial de Educación ya ha inscrito a diversos escolares con la adscripción al nuevo colegio, aunque recibirán sus clases durante el próximo curso en dos aulas habilitadas para este fin junto al centro El Vivero.

El 10 de marzo la Dirección Provincial de Educación denunció ante el juzgado los daños ocasionados por los gamberros en el centro escolar.