El ayuntamiento ya tiene ultimada la apertura de un local en el paseo de Cánovas en el que tres mujeres policías atenderán a las víctimas de la violencia doméstica. El jefe del cuerpo, César García, indicó ayer que durante el 2003 se ha actuado en 13 casos de este tipo y en tres de exhibicionismo. Pero, además, la oficina hará funciones muy semejantes a las que se efectúan en los locales que la policía tiene en la plaza de San Jorge y Aldea Moret. Los vecinos podrán acudir al departamento para formular sus quejas y denuncias y, con el tiempo, está previsto que también puedan efectuarse los pagos de las multas para evitar desplazamientos a la jefatura.

La policía continuará con las tareas de vigilancia de perros peligrosos que existan en la ciudad y de aquellos dueños que permiten que sus canes arrojen los excrementos en la vía pública, lo que motiva quejas.