La Comisión Técnica del Agua, presidida por el concejal de Infraestructuras, Miguel López, trató en su reunión de ayer (la numero 12) el problema de olor y sabor del agua potable surgido en las últimas semanas como consecuencia del descenso del nivel del embalse de Guadiloba, de la mayor presencia de agua bombeada desde el Almonte y de las elevadas temperaturas.

En la reunión se revisaron de forma detallada las medidas aplicadas hasta ahora, "lo que ha servido para mitigar el problema de los olores y sabores pero no para eliminarlo en su totalidad", por lo que se ha acordado estudiar otras soluciones, siendo previsible que esta situación se mantenga en tanto no bajen las temperaturas, informa el consistorio en nota de prensa.