El expediente de la modificación del plan de urbanismo en la parcela de las Carmelitas se volverá a debatir en la próxima reunión de la comisión de Urbanismo después de que ayer se dejase sobre la mesa. La comisión celebra su reunión ordinaria todos los lunes, aunque su presidente, José Antonio Villa, indicó ayer que es probable que antes haya un pleno extraordinario, previsiblemente el lunes o el martes, en el que irá la aceptación de la renuncia del concejal Manuel Rodríguez Cancho, que también deja la diputación provincial.

Tras pasar de nuevo el expediente por la comisión, sesión a la que asistiría el suplente de Cancho en este órgano, el expediente se llevará a un nuevo pleno de la corporación local, sesión que coincidirá con la toma de posesión de Belén Lozano, que sustituye a Cancho.

Tras lo ocurrido ayer en Urbanismo, en la que el expediente se dejó sobre la mesa, en la próxima reunión la modificación del plan podría dictaminarse a favor con los 4 votos del PP. Lo que ocurra en el pleno seguirá dependiendo del edil no adscrito, Felipe Vela, ya que el PP, aunque no esté Cancho, sólo tiene 12 votos y se necesitan 13.

Vela lo apoya, pero ayer insistió en que el gobierno "no puede hacerme que apruebe algo con los ojos cerrados", en relación a que la propuesta de convenio que regula la operación es de julio y reajusta el documento firmado en noviembre por El Corte Inglés, la congregación de religiosas y la sociedad mercantil que promoverá los pisos. Esa propuesta se presenta "en un papel de secretaria y en blanco --sin que esté firmado--".

En la comisión celebrada ayer se informó por parte del secretario general del consistorio que el documento de julio cuenta con la aceptación verbal de las partes. Vela indicó que debe refrendarse con la firma del documento, y apuntó que en el expediente todavía falta el informe de Intervención y las operaciones de compra con las cantidades que se pagan por el terreno, documentos que, insistió, son "requisitos mínimos a cumplir" para que vote a favor.

Por su parte, Villa indicó que alguien, en referencia al portavoz de IU, Santiago Pavón, define la operación como pelotazo y "casi, casi estoy de acuerdo", dijo, para después explicar, aludiendo a declaraciones del presidente de la agencia de la Vivienda, que en todas las operaciones hay unos beneficios, que incluso pueden ser muy elevados, pero que en estas actuaciones hay que tener en cuenta dos cosas: el beneficio global que aporta a la ciudad, y no solo si hay bloques, un centro comercial o unos aprovechamientos, y que esté dentro de la norma. Villa insistió en que el expediente está bien formado y que no hay inconveniente en hacer una nueva valoración.