Un día pensó que todo lo que había escrito había sido fruto de la casualidad y que ya no podría escribir nunca más. Pero una mañana, curioseando en internet, se encontró con las bases del premio de cuentos Ciudad de Coria y volvió a su papel en blanco. Se dedicó a él durante tres meses, todas las tardes de todos los días. De aquella placentera ocupación nació ‘La mirada del orangután’.

El título del libro se lo debe a Daji, el orangután del zoo de Madrid. «Lo vi hace ya unos años, y me impresionó su mirada fija y examinadora, una mirada que atravesaba el cristal blindado con su fuerza y su tristeza infinita», explica Chelo Sierra, llena de gozo al saber que su obra literaria, que ya ganó el Ciudad de Coria, ha sido una de las 10 seleccionadas para el Premio Setenil al Mejor Libro de Relatos publicado en España, convocado por el Ayuntamiento de Molina de Segura, dotado con 10.000 euros, y que se ha convertido en el Oscar del cuento, uno de los galardones literarios más importantes al que un escritor puede aspirar.

«Siento que este premio me hace visible, me coloca en el mapa para que la gente sepa dónde estoy y qué hago. Estar junto a escritores tan importantes es un lujo a pesar de que ser finalista todavía no es ganar, para mí estar en esa exclusiva lista ya es un premio. Estoy feliz», decía ayer a este diario.

De esa mirada de Daji surgió el paralelismo con la mirada del escritor. La obligación de mirar de otra manera, mucho más escrutadora, para ver y contar aquello que normalmente se le escapa al ojo humano. Doce relatos con personajes de conflictos muy diferentes que confluyen en el último capítulo, a modo de epílogo y a través de la mirada de una persona que trabaja en una autoescuela, para mostrarse esta vez de frente, sin revés, sin lado oculto.

Ya lo dijo Charles Chaplin, mirada de cerca, la vida es una tragedia; vista de lejos, parece una comedia. La mirada de Daji no se le borra, y Chelo Sierra no ha vuelto a ir a un zoo ni volverá a hacerlo.