Las familias de los alumnos del colegio de educación especial Proa ya conocen la ubicación del nuevo centro. Será en la urbanización de la Sierra de San Pedro, más allá de la vía del tren y cerca del centro de interpretación de la minería de Aldea Moret.
Así lo manifestó ayer a este diario uno de los miembros de la Asociación de padres (Ampa) del centro, que explicó que conocieron esta ubicación en la reunión que mantuvieron el pasado 18 de diciembre con el presidente de la Junta, Guillermo Fernández Vara. Los padres se quejan de que el presidente les recibió para comunicarles una decisión ya tomada, no para contar con su opinión.
La parcela asignada no ha sido nunca del gusto de los padres, que ya se habían manifestado contra ella el pasado mes de marzo. A los padres no les parece adecuada, primero porque está aún más lejos del centro de Cáceres que el colegio actual. Pero también porque la zona no está todavía urbanizada, por lo que los niños "estarán primero solos en medio del campo -decía ayer un miembro de la Ampa- y luego tendrán que soportar todas las obras de urbanización alrededor". En el centro hay actualmente más de 80 niños, la mitad de ellos residentes.
INTEGRACION Los padres de los alumnos habían pedido insistentemente que el colegio estuviera más cerca del centro de Cáceres. "Eso facilita su integración --dicen los padres--, además de hacer más fácil el desplazamiento a cualquier actividad en la ciudad". Actualmente, cada vez que los niños tienen que desplazarse hay que contratar un autobús.
A los padres les parece que había más posibilidades. Y citan una parcela en Nuevo Cáceres que ya tiene la calificación de docente y que resolvería muchos de esos problemas: permitiría ir andando a muchas actividades o coger un autobús urbano con más facilidad que en la parcela prevista, que está en una zona sin urbanizar.
EL PERIODICO intentó ayer ponerse en contacto con la Junta de Extremadura para confirmar si la decisión sobre la ubicación era firme y si había razones que impedían que fuera otro el lugar elegido, pero no se obtuvo respuesta. Los miembros de la Ampa siempre habían pedido que el colegio saliera de Aldea Moret, pero no por el barrio, sino por el alejamiento. Y se preguntan por qué la Junta no ha hecho pública la asignación de esta parcela y por qué no rebate públicamente las manifestaciones de los padres de los alumnos si las considera equivocadas.
