"Para llegar a mi casa desde la residencia tengo que dar un rodeo enorme, ir por Camino Llano, obispo Galarza, Las Delicias, San Blas y ronda Vadillo, casi recorro todo el centro de Cáceres", explicaba ayer Manuela, que reside en San Marquino, en la zona de Fuente Rocha, que con las obras se queda sin uno de sus dos accesos. A Manuela le parece bien que se ensanche Mira al Río para eliminar los atascos que se producen en esta calle, pero lo que no entendía es por qué en la plaza de San Francisco se ha proyectado una rotonda, "¿tiene sentido una rotonda aquí?, la verdad es que no lo sé ni lo entiendo".