Parte de los pagos certificados por valor de 800.000 euros corresponden a la falsa bóveda del Embarcadero (la nave minera de Aldea Moret rehabilitada), que se proyectó para mejorar la climatización e insonorización. En otras dos ocasiones anteriores, el ministerio ya planteó objeciones a la rehabilitación del edificio. Fue por la reforma de la cubierta y por los criterios aplicados para adjudicar la obra.