Decidido a dar mayor protagonismo al sector del taxi en la Cámara de Comercio, el nuevo responsable de Radio-Taxi se marca como reto lograr que las 72 licencias de la capital cacereña, con un centenar de trabajadores, sean las primeras en la región en disponer de un GPS que les permita estar localizados desde una central.

--Afirma que la relación con el ayuntamiento es importante...

--El problema no es el ayuntamiento sino los políticos. Unos te dicen una cosa y otros, otra. Hemos tenido el problema de las tarifas. Teníamos que haber tenido la subida desde primeros de año, pero no mandaron los informes a la Junta de Extremadura y hemos tenido que retrasarlo hasta julio. Ya está todo resuelto y el día 1 las nuevas tarifas entrarán en vigor.

--¿Cree que la subida puede repercutir negativamente?

--No, porque tendría que ser fuerte, pero no vamos a hacerlo. Sólo se notará entre siete y diez céntimos por cada concepto. El usuario no la va a notar mucho. Nos correspondería más subida, pero no hemos querido porque sería una diferencia muy grande. Cada año iremos subiendo un poquitín más hasta que nos pongamos al día con los carburantes, el IPC y demás.

--¿Qué otras cuestiones cree prioritarias para el sector?

--Queremos controlar los taxis por GPS desde una central. Allí tendrían un monitor y estaría viendo en todo momento qué taxis están libres y ocupados. La central dirigiría los servicios y sería más rápido, fluido y barato para el cliente. El sistema se está implantando en muchas ciudades españolas. Tenemos varias ofertas de empresas y pediremos subvenciones, como están haciendo en otros ayuntamientos, comunidades autónomas y el Ministerio de Fomento.

--Habla también de la seguridad para los conductores...

--Cáceres es una ciudad cada vez más grande y, como pasa en las grandes, conforme van creciendo, van siendo un poco más inseguras. Un taxista en el coche está vendido. Los problemas que ha habido han sido por gente con intoxicación etílica que se ha puesto borde o clientes que no han querido pagar. La noche es otro mundo. El sistema GPS incorpora una alarma con el 112.

--¿Es más útil que la mampara?

--En España no hay un modelo de taxi que tenga sistema de mampara. Si se lo pones al coche, el cliente se siente como en una lata de sardinas. Con el sistema del 112, con pulsar un botón enseguida estás mandando una señal a la policía para que sepa dónde estás.

--¿El número de licencias en la ciudad es suficiente?

--Tuvimos que poner un día libre porque había coches de sobra. Ahora hay días en los que podrían hacer falta taxis, pero otros que no. Estamos librando diez coches diarios y hay días en los que sobrarían otros 20 o 30, pero otros que faltan.