Llega septiembre, y eso implica decir adiós a los chapuzones diarios que cientos de niños de la ciudad se han dado en las cinco piscinas municipales: Parque del Príncipe, Aldea Moret, Pinilla, Camping y Valdesalor. El edil de Deportes y Festejos, Lázaro García, asistió ayer a la clausura de los cursos de natación, celebrada en la piscina del Parque del Príncipe.

"Gracias a los dos programas, Adultos al agua y Ningún niño sin saber nadar , cada vez hay menos ciudadanos que no saben defenderse en el agua. Son cursos muy exitosos con más participantes inscritos año tras año. Unas 500 personas han pasado este verano por las clases", declaró el edil. Para poner fin al curso, los niños han sido obsequiados con camisetas, libros y gorras, y han realizado diferentes juegos y exhibiciones.

Las experiencias

Estos dos meses han sido espléndidos para la mayoría. Así lo explicaba ayer Clara Jiménez, una de las monitoras: "He vivido una experiencia única al poder trabajar con un grupo de niños y con un menor discapacitado, que me ha enseñado más que yo a él durante un mes".

Fran y Varinia son dos de los niños que han participado en estos cursos, y aseguran que lo han pasado "genial", han hecho "muchos amigos" y esperan "con ganas" volver a la piscina el próximo verano. También los adultos han tenido la oportunidad de aprender a nadar. La edad no importa: desde los cuatro años hasta los más mayores, todos han disfrutado de estos chapuzones diarios durante quince días de diversión.

Pero llega septiembre y tienen que cambiar los bañadores por las mochilas, los libros y los profesores, hasta una nueva cita el próximo verano.