Hacía año y medio que mi mujer y yo reclamábamos un documento fundamental para vender a una constructora un edificio propiedad de mi esposa y que heredó de su madre. El notario no podía registrar sin la declaración de herederos que en su día hizo el juez. Pero el papel no aparecía. En los juzgados se pasaban la pelota de unos a otros y no avanzábamos. Nos vimos obligados a reclamar al Consejo General del Poder Judicial y eso fue fundamental. El lunes nos llamaron para decirnos que el papel había aparecido. Por eso, la noticia de que se están ordenando los expedientes me parece de perlas porque es beneficioso y necesario.

*Catedrático de la Uex.