El propietario del doberman, el dogo argentino y el pitbull que conviven en un chalet de la calle Rodríguez de Molina, Francisco Javier Luca, presentó la documentación en regla de los animales a la policía local, según informó a este diario.

La Protectora de Animales denunció hace dos días la situación, supuestamente irregular, en la que se encontraban estos canes. Miembros del colectivo acudió el sábado al chalet, al ser reclamados por la policía, ya que el doberman supuestamente se había escapado y había intentado atacar a dos personas.

Luca se responsabilizó del incidente que provocó el doberman, ya que se quedó fuera del chalet por un descuido suyo cuando él fue a dar de comer a los animales por la tarde. "El perro sólo trató de defender la casa, fue un error mío porque cuando me fui pensé que estaba dentro", declaró.

POR CARACTER Sostuvo que el doberman es "inofensivo", pero que al quedar fuera del recinto del chalet estaba "desorientado", lo que provocó, a su juicio, su agresividad. "Esa misma tarde entregué los papeles de los animales, que están registrados, a la policía", señaló.

El propietario asegura que los animales no están adiestrados para atacar ni su destino son las peleas de perro, una posibilidad que apuntaba la protectora. "Tengo este tipo de perros porque me gustan por su carácter", aseguró.

Confirmó que el chalet donde se encuentran está normalmente deshabitado, pero negó, como denunció la protectora, que los animales estén abandonados, ya que los visita diariamente para darles de comer y pasearlos.