El caso del trágico suceso que poco antes de las navidades pasadas conmocionó a la ciudad, el atropello mortal ocurrido en la avenida Virgen de Guadalupe, llegará a juicio 14 meses después de producirse.

Ocurrió el 17 de diciembre del año pasado, y según pudo saber ayer EL PERIODICO, el conductor que causó la muerte a María Victoria Maya Casares, de 45 años, se sentará en el banquillo de los acusados el próximo 16 de febrero. Para las 10.00 de la mañana de dicho día ha fijado el Juzgado de lo Penal de Cáceres el juicio contra Efren Silvino S. C., que se enfrenta a tres años de prisión, pena que pide para él tanto el fiscal como la acusación.

Ambos le imputan un delito de homicidio por imprudencia grave, por el que piden la pena de prisión citada además de la privación del derecho a conducir en el plazo de seis años y el pago de 105.324 euros --90.278 a la pareja de la víctima y 15.046 a sus padres--. Para la defensa los hechos ocurridos son constitutivos de una falta, por conducción a velocidad inadecuada sin que llegue a ser calificable de imprudencia grave, por lo que estima que procede imponerle un mes de multa y la privación de conducir por tres años.

Eran sobre las 03.45 horas del 17 de diciembre del 2004 cuando ocurrió la tragedia. El acusado conducía por la avenida Hernán Cortés, procedente de la plaza de Argel y en dirección a Virgen de Guadalupe "a excesiva velocidad y haciéndolo bajo la influencia de una ingestión alcohólica precedente que limitaba su capacidad de conducción", recoge el Ministerio Fiscal en su calificación de los hechos.

Como consecuencia de ello, se añade, perdió el control del vehículo, recorriendo el trayecto por la plaza de Alférez Provisional en zig-zas hasta un punto de no retorno, girando 180 grados sobre sí mismo e invadiendo la zona peatonal del paseo central, donde arrolló a María Victoria Maya Casares. Esta, como se recordará, había estado celebrando una cena de navidad con un grupo de compañeros y en ese momento se encontraba parada en el paseo central, una zona peatonal, con una amiga.

A María Victoria la alcanzó, lanzándola a unos 20 metros de distancia. También causó daños en la máquina de zona azul, los jardines y un coche aparcado.