Una de las intervenciones que más condiciona el futuro desarrollo de la ciudad es la promoción de 3.968 viviendas que se construirán en la finca de Mejostilla de Espadero, en el norte del casco urbano. De este proyecto destaca la inclusión de 2.400 pisos del programa especial, con un precio de 60.000 euros. Tras su presentación el pasado octubre y el anuncio de que las obras se iniciarían en verano, el proyecto, que la Junta tramita como de interés regional, se ha ralentizado. Desde la Agencia Extremeña de la Vivienda se dijo ayer que sigue en fase de estudio y que no está ni olvidado ni descartado. El mensaje que se quiso trasladar fue de tranquilidad para los 4.000 demandantes que se han apuntado a esta promoción.

La mismas fuentes, que aclararon que las obras no empezarán antes de agosto, remitieron a la última intervención del presidente de la agencia, Javier Corominas, en la que dijo que "nada se ha parado" e insistió en que por parte de la agencia se están revisando los proyectos del plan especial para garantizar la dotación de servicios, principalmente en sitios que, como Cáceres, están fuera del casco urbano.