E Plan General Municipal de urbanismo (PGM), como se denomina ahora al PGOU, volverá a exponerse al público probablemente en septiembre. El alcalde, José María Saponi, confirmó ayer la necesidad de esta segunda exposición pública ante los cambios sustanciales que está sufriendo el documento, que diseña el desarrollo urbanístico futuro de la ciudad, con el estudio de las alegaciones y su adaptación a los nuevos límites de la Zona de Especial Protección de Aves (ZEPA).

El alcalde se reunió ayer con parte del equipo de gobierno que participa en el estudio de las alegaciones, los técnicos y asesores para comprobar el avance del proceso. Tras el encuentro, anunció a los medios de comunicación que no habrá retrasos sobre las previsiones, ya que se ha dictaminado más del 50% de las más de 570 reclamaciones presentadas al documento aprobado inicialmente. Saponi calculó que en septiembre podría exponerse al público, a finales de año se remitiría a la Junta de Extremadura para su visto bueno preceptivo y a principios del 2007 se aprobaría definitivamente. En cualquier caso, "antes de las elecciones" municipales de mayo, según matizó.

LA COMISION Después de esta reunión, la comisión municipal de Urbanismo continuó con el estudio de alegaciones. Ayer tocó el turno a las reclamaciones presentadas contra la superficie reservada para zona verde en la Montaña, la que se ha dado en llamar la futura casa de campo cacereña, y en la Sierrilla. Los propietarios de este suelo privado reclaman modificaciones a la forma de cesión al consistorio de estos terrenos, que es gratuita aunque se compensa con participaciones en suelo urbanizable.

La comisión desestimó las alegaciones y mantiene los criterios que establecía el documento inicialmente. En el caso de la Sierrilla, se plantea un reestudio de la situación por la entrada en vigor del nuevo límite de la ZEPA y la posible ampliación de esa zona verde que, al igual que en la Montaña, se apropia el ayuntamiento para una posible ampliación del parque del Príncipe.

En cuanto a la Ribera del Marco, se estimó la alegación presentada por la plataforma en defensa de esta zona y el Calerizo, que pedía un plan especial para su protección arqueológica. Aunque la comisión entiende que la redacción de este plan especial debe hacerse al margen del plan general de urbanismo, se ha estimado la alegación para que quede constancia de ello, según valoró el presidente de la comisión, José Antonio Villa.