El comité de empresa de la planta de cerámicas Waechtersbach y el sindicato UGT anunciaron tras su reunión de ayer el encuentro que la próxima semana --previsiblemente el miércoles-- mantendrán con el presidente de la Junta, Juan Carlos Rodríguez Ibarra, para que medie en la crisis que atraviesa la tercera industria más importante de la ciudad de Cáceres.
La inquietud de los trabajadores ante su futuro sigue presente, pero el hecho de que el presidente haya atendido la petición de reunión que el sindicato UGT ha hecho en nombre del comité "nos da un poco de esperanza", indicó ayer a este diario Francisco Morcillo, representante del comité, así como Miguel Angel Rubio, de UGT.
Para concretar los planteamientos y peticiones que trasladarán a Ibarra en el encuentro, representantes sindicales y de los trabajadores de la fábrica mantuvieron ayer una reunión. Nada quisieron adelantar de los acuerdos alcanzados en la misma, pero teniendo en cuenta que el principal deseo de todos los trabajadores es que la fábrica no se cierre, no ocultan que uno de los fines es buscar el apoyo de la Administración regional para que pueda mantenerse abierta.
Pero el propietario de la fábrica, Alejandro Rodríguez Carmona, se muestra pesimista. Ayer reconoció a EL PERIODICO que tal y como está la situación no es fácil poder reflotar la fábrica. "La verdad es que no vemos futuro, los socios hemos invertido dos millones de euros para intentar seguir adelante, pero la competencia asiática es bestial, y tenemos que reconocer que no podemos hacer más". Carmona aseguró que si consideraran posible alguna alternativa arriesgarían, "pues llevamos tres años intentando salvar esta fábrica, pero ahora ya hemos de reconocer que es imposible, ya que no se puede competir con gente que tiene costes diez veces más bajos que los tuyos".
Por el momento el trabajo en la fábrica continúa, y según indicaron ayer representantes sindicales a este diario parece que hay pedidos para garantizar la actividad al menos en este mes. Y respecto al cobro de las nóminas correspondientes a octubre, aún pendientes, Francisco Morcillo indicó que ayer se realizaban las gestiones para poder ingresar a cada uno de los 88 trabajadores de la plantilla 550 euros a cuenta de dicha nómina, que la empresa ha garantizado. "Confiamos en que como muy tarde el lunes todos los trabajadores puedan haber recibido la transferencia de esta cantidad".
Por su parte, la administración concursal designada por el Juzgado de lo Mercantil para hacerse cargo de gestionar la situación de insolvencia de la sociedad --integrada por el abogado José Viñuela y los economistas José Manuel Mariño y Luis Carlos Ruiz-- continúa trabajando en el informe que sobre la fábrica le ha encargado el juez.
