La Fundación Amancio Ortega dio dinero para instalar cuatro aceleradores lineales nuevos en la comunidad. El primero en salir a licitación ha sido el de Badajoz. El de Cáceres (el SES lo utiliza mediante un convenio con una clínica privada) tiene fallos y los pacientes están siendo derivados, entre otros lugares, a Plasencia. Pero el de Plasencia también sufre averías porque atiende a «más de 50 personas diarias», en palabras de Maribel Carpintero, delegada local de la Asociación Oncológica Extremeña. Por eso llevan meses recogiendo firmas para pedir al SES que agilice la instalación del nuevo acelerador en Plasencia y por eso, ayer, Carpintero pidió a la delegación cacereña de la Aoex sumarse a su lucha. «Badajoz tiene dos aceleradores y me parece muy bien que se licite otro y que sea la ciudad de referencia en el tratamiento, pero pedimos que, antes que en Mérida, se instale en Plasencia, porque Mérida ya tiene Badajoz a unos minutos. Y si no, que nos pongan el de Cáceres antes», señaló la delegada local de Aoex, que recordó sin embargo que el del hospital Virgen del Puerto atiende a pacientes de tres áreas de salud, Plasencia, Coria y Navalmoral de la Mata, mientras que el de Cáceres solo atiende a una. El tiempo va pasando y juega en contra de los pacientes porque Carpintero subrayó ayer que el actual acelerador lineal de Plasencia «no resistirá más allá del año 2020» y, según sus cálculos, según la previsión de instalación del SES y los plazos que transcurrirían entre la instalación, las pruebas y su puesta en marcha, «nos iríamos al 2021 o 2022».