La plataforma en contra del ecoparque, que integran ya más de una decena de colectivos y 21 propietarios de la finca donde se pretende ubicar, alertó ayer públicamente de los problemas medioambientales que puede causar la ubicación que para este proyecto, en la finca del Millar de los Licenciados y a tan sólo tres kilómetros de la población, han elegido los responsables de la Junta de Extremadura y el Ayuntamiento de Cáceres.

Por ello, anunció Juan Jesús Tato, portavoz de los citados colectivos y, asimismo, de la Plataforma Vecinal de Aldea Moret, han decidido llevar a cabo una serie de medidas que consideran "fundamentales" para demostrar que el lugar elegido "no es el idóneo", y además "puede dar problemas de legalidad".

Estas medidas se centran en las administraciones. En este sentido, y tras advertir que "las previsibles afecciones al dominio público hidráulico deben estar sometidas a licencia municipal y contar con la autorización de la administración hidráulica competente, tanto por la contaminación de los vertidos a los cauces como por la posible contaminación de los acuíferos, en este caso del acuífero del Calerizo", anunciaron que han solicitado a la Confederación Hidrográfica del Tajo un informe de impacto medioambiental de este proyecto. El fin, estudiar y determinar qué contaminación puede causar al Calerizo y la ciudad.

Recuerdan, asimismo, que el Plan General Municipal obliga para estas actuaciones la redacción de un proyecto técnico que incluya un estudio de impacto ambiental y un plan de mejora y recuperación. "Es por tanto muy razonable solicitar la emisión de un informe técnico a la Dirección General de Medio Ambiente y su Servicio de Protección Ambiental", algo que tienen intención de solicitar directamente al director general de Medio Ambiente, al que los colectivos en contra del ecoparque-basurero han solicitado ya una entrevista.

Igualmente se muestran interesados, "por ser fundamental", en conocer el informe técnico del proyecto del ecoparque. En este sentido, exigen a la Junta que informe de sus características concretas, especificando qué construcciones implica, qué módulos contiene, cuáles son las emisiones previstas tanto sólidas como líquidas y gaseosas, y qué tratamiento de depuración recibirán estas emisiones. También, información sobre su ubicación concreta, detallada y cartografiada; necesidad de superficie que se contempla; y cuál será el área de influencia de sus emisiones.

Y al ayuntamiento le demandan la elaboración de un Plan Especial para determinar el área del basurero, y un Plan de Gestión de Residuos, "que no ha de olvidar son necesarios".