La presidenta de la Asociación de Vecinos de Santa Bárbara, Guadalupe Iglesias, anunció ayer la creación de una plataforma vecinal en defensa de la permanencia en Aldea Moret del Centro de Educación Especial Proa. Iglesias indicó que el barrio se opone de plano al traslado e insistió: "Para la única cosa buena que tenemos no permitiremos que se la lleven". La dirigente vecinal realizó estas declaraciones después "de haber escuchado --aseguró-- los rumores que hablan de un posible cambio de ubicación".

Guadalupe Iglesias comentó que el colegio es una fuente de ingresos para el barrio: "En él trabajan profesores, vienen los padres, hay muchos alumnos y eso es beneficioso para Aldea Moret. No vamos a consentir que se lo lleven", reiteró. La presidenta consideró que la Junta y las instituciones de las que depende el colegio "nos deben una explicación sobre lo que está pasando". Añadió que el centro lleva en Aldea Moret muchos años y que los vecinos tienen especial sensibilidad con el asunto puesto que la institución educativa está muy vinculada a la barriada. "Estamos dispuestos a unir a todos los vecinos en esta causa".

Entretanto, la Consejería de Educación reiteró ayer que los técnicos de su departamento siguen trabajando en el desarrollo de un informe que evalúe la situación del inmueble y del que saldrá una solución definitiva: es decir, si se arregla el centro actual o si se construye uno nuevo. Las declaraciones de la consejería se produjeron justo el día en que Antonio Bermejo, director de Relaciones Institucionales de la Caja de Ahorros de Extremadura --entidad propietaria de los terrenos-- mantuvo una reunión con la secretaria general de Educación en la que abordaron este tema. Fuentes de la Junta dijeron que el encuentro tenía carácter meramente informativo y que en él se trasladó a la entidad financiera la posición del gobierno regional. "No hay nada concretado", apuntaron también desde Caja Extremadura.

La situación del colegio Proa saltó a la actualidad informativa el pasado mes de noviembre, cuando la asociación de padres y madres del centro escolar denunció públicamente el mal estado de las instalaciones.