La junta local de gobierno conoció en su reunión del pasado 24 de noviembre el contenido de un informe del jefe de la Policía Local en el que se justifica por qué se fueron adquiriendo prendas de uniformes con un gasto de 5.185 euros. Sobre la factura de este coste hay un informe de reparo de la Intervención municipal porque no se aporta una propuesta de gasto debidamente autorizada. Estas adquisiciones se realizaron porque cuando se hicieron no había contrato de suministro de uniformes y las carencias que había eran insostenibles, según explica el jefe de la Policía Local.

La junta local de gobierno había acordado el 10 de noviembre que se solicitase al responsable de la policía que emitiese un informe que identificase a los funcionarios que hubiesen tramitado la adquisición del material sin la preceptiva autorización de los órganos de gobierno y omitiendo los trámites legales. El objetivo era que una vez identificados se les abriese un expediente.

En la factura hay albaranes de prendas de uniformes que se adquirían en el establecimiento que Arcos Iris Suministros tiene en Las Capellanías. Policías que necesitaban reponer un material informaban de ello en las oficinas de la jefatura de la policía y una vez autorizado el gasto iban al almacén de la empresa, que realizaba los albaranes con el material suministrado.

LA FACTURA / Cuando Arco Iris Suministros presentó la factura, Intervención realizó su reparo porque el gasto se había hecho sin cumplir con los trámites legales establecidos, además en varios albaranes, correspondientes a los ejercicios de 2016 y 2015, no aparecía el importe de las prendas. Intervención llegó a proponer en su reparo que el gasto debería se asumido por los responsables de los pedidos.

En su informe, el jefe de la Policía Local explica que todo el material se solicitaba con el conocimiento tanto de la sección de Prevención de Riesgos Laborales como de la concejalía correspondiente y que se iba directamente al establecimiento de Arco Iris Suministros porque en ese momento no estaba contratada con una empresa la aportación de los uniformes y porque los policías no podían esperar. Así apunta que, entre otras prendas, hubo que solicitar calzados, polos, pantalones, cazadoras..., incluso el responsable de la policía precisa que él mismo tuvo que regalar pantalones a compañeros que en una intervención se quedaron sin esta prenda al romperse.

El responsable de la Policía Local añade que en varias ocasiones se interesó por estos gastos dado que la empresa suministradora reclamaba su abono y que en ningún momento se le informó de que se estaba incurriendo en una irregularidad; lo único que se le apuntaba, según matiza, era que se estaba viendo en qué partida se podrían incluir.

Sobre la falta de indicación de los importes de las prendas en algunos albaranes, por parte de la empresa se explicó a este diario que en algunos puede que no aparezcan los importes de las prendas, pero que sí se detallaban tanto el concepto como el número de unidades, cuyos precios coincidían con los de la tarifa que la empresa aplicaba a estos elementos y que era la misma en los dos años en los que hay albaranes en los que no figuran los importes.