"En vez de proteger la parte antigua, la están destruyendo". Doce del mediodía. En la tienda de alimentación Reyes, a los pies de la plaza de Santa Clara, se ha organizado una tertulia improvisada. Los clientes dan su opinión sobre la situación del barrio. Paqui Carrasco, propietaria del negocio junto a su marido, es muy clara: "Por aquí no viene nadie. Los turistas tienen que dar 20 vueltas para poder aparcar. Antes venían a comprarnos el queso, el jamón, el lomo... ahora van a otros establecimientos donde lo tienen más fácil".

Otra vecina apunta: "Se han empeñado en echarnos" y Paqui añade: "El otro día, un médico que antes vivía en Colón me decía: no sé cómo están ustedes aguantando . Si continuamos así van a dejar que se abandone".

Los vecinos son conscientes de la necesidad de realizar obras, pero piden más comprensión municipal. "En esta zona no tenemos donde aparcar. En las Candelas han puesto unos pivotes. Está todo levantado y se olvidan de los que vivimos aquí", dice otra clienta.

Y a modo de advertencia exclaman: "Si esto no cambia, tendremos que plantarnos frente al ayuntamiento".