El Partido Popular e Izquierda Unida se oponen a la instalación de la torre ascensor de 20 metros en la entrada principal del párking de Obispo Galarza. Un proyecto pionero en la región que nació con la intención de facilitar a los turistas el acceso al mirador del estacionamiento y por el que se ve toda la ciudad monumental. La plaza de Galarza es uno de los enclaves turísticos más transitados, por lo que este proyecto es muy demandado por los comerciantes de la zona.

Pero, ¿por qué se oponen? Ambos grupos (PP e IU) consideran que la iniciativa no es prioritaria de momento para la ciudad. El PP va más allá al afirmar que el proyecto no les convence porque no es acorde al entorno: "Estamos de acuerdo con que se construya la torre siempre que se modifique el proyecto" confesó el edil del PP José Joaquín Rumbo. Para los populares lo correcto sería levantar un ascensor acoplado al edificio del párking, de tal manera que desde el elevador pudiera accederse, además de al mirador y al restaurante, a las diferentes plantas del aparcamiento.

El concejal de Izquierda Unida, Santiago Pavón, también se opone al proyecto. Foro Ciudadano lo aplaude y confía en que la iniciativa se haga realidad.

La Asociación de Empresarios del Comercio de Cáceres (Aeca) se reunió el pasado miércoles con el gobierno local para expresarle su conformidad con el proyecto. Sin embargo, ni el propio ayuntamiento tiene aún claro que la iniciativa llegue a acometerse este año. La reforma de la plaza de Galarza consta de dos fases: una es la construcción de la torre, y la otra, la mejora de la accesibilidad en la plazoleta.

Hasta el momento el gobierno central ha aprobado la primera de ellas (ascensor) para lo que ha destinado 180.000 euros del nuevo Plan E. En cambio, según explicó el concejal de Desarrollo Local e Infraestructuras, Miguel López, tras decidir en pleno con los votos a favor de PSOE, PP y FC la instalación de la torre, los partidos políticos volvieron a reunirse en comisión. En esta se aceptó dejar de lado por el momento la torre y acometer primero la mejora de la accesibilidad de la plaza, que consiste en la ampliación de las aceras y la construcción de rampas para los minusválidos.

Tras esta reunión, enviaron la propuesta al Ministerio de Política Territorial, que es quien debe dar luz verde a la utilización de ese dinero para otros fines.

Por tanto, la torre de 20 metros depende de la respuesta del gobierno nacional. Y si este aprueba la reforma de la accesibilidad de la plaza, la torre no tendría partida presupuestaria y este proyecto pionero se quedaría en el aire.

PLAN ESPECIAL Pero además, al tratarse de una obra enclavada en el recinto histórico de Cáceres, debe someterse al juicio de la comisión del Plan Especial, donde se decide realmente si los proyectos que afectan a esta zona de la ciudad pueden o no llevarse a cabo. Este paso no se ha realizado todavía.

Entre tanto cruce de ideas y vaivenes políticos, los ciudadanos y comerciantes de la zona se muestran satisfechos con la construcción de este monumento que creen que será un punto de referencia para la ciudad.