La plataforma ciudadana en defensa de la continuidad del Cimov celebró ayer por la tarde una reunión atípica, en la que, por encima de las diferencias, todos los presentes coincidieron en valorar la decisión de Defensa de mantener la base con un uso militar como "un acierto positivo", según destacó su coordinador, Raimundo Medina. Además de esta interpretación en positivo, también se aludió en el encuentro que la plataforma mantuvo con los medios de información al problema que se presenta para muchos de los mandos que ahora trabajan en el Cimov y que podrían verse afectados por traslados a otros centros.

La base pasará de ser un centro de formación a sede de un regimiento de ingenieros, lo que no resuelve el futuro laboral de mandos que trabajan desde hace años en la base y que no son de este cuerpo, algunos podrán seguir en la unidad de servicios que quedará en la base, pero el futuro del resto no está claro por lo dicho ayer en la reunión, en la que se quiso llamar la atención sobre esta situación.

En la base de Santa Ana hay en la actualidad una veintena de civiles y 700 efectivos militares, de los que un centenar de mandos y 82 soldados tienen su destino en la base, ya que el resto sólo están en Cáceres durante el periodo de formación.

DISPUTA POLITICA La plataforma celebrará una nueva reunión para decidir si continúa o se disuelve. En el encuentro de ayer se trasladó a este órgano ciudadano el debate político que se ha producido en los últimos días sobre la labor de partidos y administraciones en la decisión de Defensa de mantener la base con un uso militar. El PSOE volvió a destacar el papel desempeñado por Ibarra, mientras que desde el PP se recordó las gestiones hechas desde la alcaldía. Medina destacó de manera especial la tarea realizada por Juan del Pozo, edil popular que falleció recientemente, y por el diputado socialista Victorino Mayoral.