Los padres, trabajadores y docentes del centro de educación especial Proa se mostraron ayer abiertamente a favor del traslado. Desechan que el nuevo colegio se construya en Aldea Moret y apuestan por su ubicación en la parcela de uso docente que hay en el Nuevo Cáceres.

Mientras, una plataforma vecinal, integrada por colectivos de Aldea Moret, Mejostilla y Nuevo Cáceres, ha hecho constar su "total rechazo" al traslado, siendo su propuesta que el nuevo centro se construya en la misma parcela en la que se encuentra.

Sus posturas, en ambos casos definitivas, las hicieron públicas poco antes de que responsables de la Consejería de Educación llegaran al centro Proa para, junto con su director y el concejal de Educación, iniciar la ronda de visitas a las parcelas que para la construcción del nuevo centro ha ofertado el ayuntamiento a la Junta. Ayer, por el momento, tan solo visitaron la de Río Tinto, muy cercana a la actual ubicación del centro, "porque es la única que de momento, y de forma oficial, ha ofertado el ayuntamiento", señaló Elisa Cortés, secretaria general de la consejería.

Sobre el resto de las parcelas que el ayuntamiento ofrecerá, sobre las que informó ayer EL PERIODICO, Elisa Cortés indicó que se visitarán en breve, "pues la intención de la Junta es iniciar cuanto antes la construcción del nuevo centro", para el que, recordó, el ayuntamiento cede el terreno, Caja de Extremadura financiación para las obras y la Junta para el equipamiento.

La postura de los padres la defendió Angeles Pozo Guillén, secretaria de la Ampa, durante la concentración que mantuvieron ayer, en las puertas del centro, para reivindicar el traslado y más seguridad. "No es que tengamos nada contra Aldea Moret, es solo que por los niños queremos que el nuevo centro se construya en una zona más céntrica, y nos mostramos ya abiertamente partidarios de que sea en la parcela del Nuevo Cáceres porque nos parece el lugar más idóneo".

Justifican esta consideración, entre otros motivos, en el hecho de que está muy cercana a las estaciones de autobuses y Renfe, "y muchos niños vienen de sus pueblos en autobús"; y tiene dos líneas de autobuses urbanos, lugares de ocio y un futuro centro comercial, el auditorio... "Hay prácticamente todo lo necesario para que estos niños puedan integrarse, relacionarse con otras personas, salir de paseo a zonas donde hay otros niños..., pues se debe tener claro que necesitan que la gente los vea, que los conozca, y aquí esto no ocurre".

La postura de los padres la comparten también trabajadores y docentes del centro. Incluso su director, Sixto Iglesias, manifestó a este diario que, en su opinión, "lo que necesitan estos niños es un centro abierto e integrado en la sociedad, algo que evidentemente aquí, donde estamos ahora, es imposible", y calificó también de "muy idónea" la parcela de Nuevo Cáceres.

DISCREPANCIAS Los vecinos, por su parte, reivindican que Proa permanezca en Aldea Moret, la construcción de un colegio "adaptado, moderno y seguro" en la mitad de la parcela en la que actualmente se encuentra, "que ofrece una gran riqueza arbórea y es un error desaprovecharla", indicó José María Tovar en nombre de la Plataforma Solidaria, que integran la Asociación Socio-Cultural Aldea Moret, la Asociación de Vecinos Nuevo Cáceres y Mejostilla Joven.

Esta propuesta de los vecinos fue rechazada tajantemente por los padres, que la consideran "inviable", primero "porque sería necesario dejar libre el centro para construir el nuevo, ¿y dónde se van los niños mientras?", cuestionaron; y, además, "porque si lo que pedimos es accesibilidad e integración para nuestros hijos, está claro que aquí no lo van a conseguir nunca".

Pero los vecinos, que aseguran que Proa está ya integrado plenamente en Aldea Moret, que forma parte del barrio y de sus gentes, insistieron en pedir que el centro permanezca en Aldea Moret, además, "para no dejar al barrio sin otra de sus señas de identidad", y reclamaron a la Administración que apruebe su propuesta, "un gesto --señalaron-- con el que contribuiría a no hacer mayor el gueto que ya es en la actualidad Aldea Moret"..

Fueron declaraciones y argumentos que causaron el enojo de los padres, que se cuestionan el porqué de su postura "si nunca han pensado en las necesidades de los niños, ni en su bienestar, pues de hecho la mayoría de los vecinos no conocen el colegio". Y aunque aseguraron no entender a qué se debe su empeño de que se queden en el barrio, no ocultaron su sospecha de que "quizás no están utilizando porque les interesa ahora para algo, pues aquí no les hemos visto nunca, ni para apoyarnos en reivindicaciones ni para nada".

Tampoco comparte los argumentos de los vecinos el director del centro, que advirtió, entre otros hechos, que de los 86 alumnos que tiene Proa "51 son de la provincia y 35 de Cáceres, de los que solo dos son de Aldea Moret", junto a otra "incoherencia", el hecho de que reivindican que el centro se quede "cuando hay más de 86 alumnos de Aldea Moret que diariamente salen del barrio para irse a centros educativos de otros barrios".