El ayuntamiento ha decidido endurecer la prohibición de aparcar en la ciudad monumental para evitar que de lunes a viernes se convierta en un aparcamiento público, como ha venido denunciado la asociación de vecinos de la zona. A esta decisión se deben las últimas actuaciones de la policía local que, en base a ello, según confirmó ayer el concejal de Movilidad Urbana, Carlos Jurado, ha denunciado a al menos una decena de coches supuestamente no autorizados o mal estacionados en diversas zonas del recinto.
Este diario ya publicaba ayer que cinco vehículos habían sido denunciados en la calle Amargura el jueves y ayer se sancionó a otros tantos en la plazoleta del Socorro. Algunos residentes de la zona afectados por las multas de ayer, como fue el caso de Jesús González, volvieron a expresar sus críticas a la medida adoptada "de forma tan expeditiva sin dar alternativas a los vecinos y sin avisar". El jueves también protestaron vecinos de la calle Amargura.
El concejal aseguró, en cambio, que los vehículos multados estaban mal aparcados, como dijo que era el caso de los de la calle Amargura, ya que se encontraban sobre las aceras o frente a las fachadas de edificios. Advirtió de que se seguirá con las sanciones por el bien del recinto.
