El secretario de la Asociación Ronda Este, Angel Casado, mantendrá hoy un encuentro con el alcalde José María Saponi y el concejal de Urbanismo Andrés Nevado, para ofrecerle la cesión gratuita de los terrenos necesarios para que el ayuntamiento cacereño pueda construir la ronda este, cinturón viario que comunicará la glorieta del ferial con la N-521 y que es uno de los proyectos de infraestructura más importantes que proyecta el equipo de gobierno.

Aunque la petición de esta asociación, fundada en 1988, no es nueva, parece que el asunto de la ronda este cobra interés aprovechando la revisión del Plan General de Ordenación Urbana. El colectivo, formado por al menos 15 propietarios, aspira a que la modificación del PGOU le permita actuar en 110 hectáreas de su propiedad para la construcción de 3.086 viviendas, que sería la solución definitiva para la expansión de la barriada de San Marquino, actualmente condenada al aislamiento.

La petición de la asociación se justifica en el "agravio comparativo" que se ha producido con la constructora Magenta, donde sí se ha permitido la ejecución del Residencial Universidad en base a la aplicación de la Ley del Kilómetro. Ronda Este propone una densidad de viviendas igual a la de Magenta: 35 por hectárea y recuerda el reciente posicionamiento de la Junta: "Dice que no habría ningún problema en hacer actuaciones urbanísticas sobre esta zona adoptando las medidas correctoras", sostiene Casado.

LA CASA DE CAMPO

Pero además de la cesión gratuita de suelo, la asociación plantea al consistorio la posibilidad de que se ejecute un mirador desde el cerro de la Butrera, otro desde el Amparo, un aparcamiento para autobuses y, lo más ambicioso, la entrega de terrenos necesarios para hacer una Casa de Campo.

Casado subraya que todos los propietarios de los terrenos --que comprenden la barrera del Amparo, la umbría de la Sierra de la Mosca hasta llegar prácticamente a la Residencia Asistida-- están de acuerdo en esta negociación.

El proyecto que maneja la asociación beneficiaría, especialmente, al entorno San Marquino-Fuente Rocha y supondría un crecimiento para el barrio en más de 12.000 personas.

La intención es construir un polígono con un 40% de zona verde --más del doble que El Rodeo-- y el resto del terreno se dedicaría a edificación de baja altura y espacios dotacionales: centros educativos y de salud o, incluso, la tan añorada farmacia para la barriada. Ahora se carece de ella puesto que no hay población suficiente para mantenerla.