Ya están en marcha las obras para cerrar el primer anillo de fibra óptica de la provincia cacereña, que permitirá que las grandes autopistas de datos lleguen hasta la mayoría de los principales municipios sin riesgo de colapsos y con todas las posibilidades abiertas a las tecnologías del futuro. La denominada Red Científico Tecnológica que promueve la Junta de Extremadura tiene en ejecución las obras de los últimos tramos que formarán ese anillo entre Cáceres, Plasencia, Navalmoral, Trujillo y Miajadas, localidades a su vez conectadas con la provincia de Badajoz a través de Mérida.

Según los datos facilitados por el director general de Telecomunicaciones y Sociedad de la Información, Rafael Martín Espada, a fecha de hoy se ha ejecutado alrededor del 80% de la red que aparece recogida en el mapa regional de extensión de fibra óptica previsto por la Junta. Enlaza la región de norte a sur desde Plasencia a Fuente de Cantos, con canalizaciones este-oeste de Don Benito-Villanueva a Badajoz, de Navalmoral de la Mata a Plasencia, y de Cáceres a Trujillo.

En concreto, el anillo de la provincia cacereña estará listo en un año. Ya tiene ultimados los tramos Mérida-Cáceres, Mérida-Trujillo (por Miajadas), y Plasencia-Navalmoral. Su cierre solo depende de los enlaces Cáceres-Plasencia, actualmente al 50%, y Trujillo-Navalmoral, casi finalizado. Los tramos urbanos son más complejos y algunos se encuentran en obras o en trámites, por ejemplo el de Plasencia, que habrá concluido el próximo año, o el de Cáceres, que tiene una parte ultimada mientras el resto sigue pendiente de los permisos.

Según Rafael Martín Espada, para realizar los tramos de interconexión entre municipios se suelen aprovechar las canalizaciones de la DGT que discurren por las autovías, gracias a un convenio entre administraciones. En su defecto las introduce la Junta, pero debe pedir los permisos necesarios y realizar la obra, de modo que tarda más tiempo. Los tramos urbanos tienen mayor dificultad porque pertenecen a distintas instituciones con requisitos diferentes (ayuntamientos, diputaciones, Gobierno...), y los trámites se complican.

El desembolso es considerable. Solo el tramo Cáceres-Plasencia, acometido en estos momentos por la empresa Sice, supone una inversión de 541.595 euros. Sin embargo, según el director general del área, "el amplísimo ancho de banda de la fibra óptica convierte sus redes en auténticas autopistas de la información que permiten un gran flujo de datos, con una capacidad casi infinita. Las aplicaciones de hoy no las colapsan. Ofrecen mayor garantía para afrontar el futuro". Por ello, Rafael Martín afirma que a medida que las autovías avancen y exista posibilidad presupuestaria, "llevaremos estas redes a los polígonos industriales y a otros municipios".