El ayuntamiento revisará el proyecto de reforma de la calle Rincón de la Monja y tratará de buscar una solución que satisfaga a los vecinos, que han mostrado su malestar por las escaleras instaladas y aseguran que la vía no dispone de la pendiente necesaria para que el agua tenga una salida natural en caso de lluvia.

El concejal Javier Castellano confirmó ayer que el jefe de Infraestructuras se encargará de efectuar esa revisión del proyecto "para atender --subrayó-- las reivindicaciones vecinales" y ver "en qué medida puede ser corregible lo de los escalones".

El edil, que con un técnico se reunió con los vecinos y el presidente de la Asociación Ciudad Monumental, Luis García, explicó que se supervisará "la pendiente transversal para que las aguas se puedan recoger". Sentenció que si no se cumplen los porcentajes, "he dado instrucciones a los técnicos para que se corrijan". Insistió en que la obra cumple la ley de accesibilidad y que el problema de acceso a la Filmoteca se ha solucionado con la entrada por la calle Pereros.

Mientras, los vecinos han enviado un escrito al Defensor del Pueblo y piden que medie contra el proyecto ya que, opinan, contraviene "la ley 51/2003, de 2 de diciembre, de igualdad de oportunidades, no discriminación y accesibilidad universal de las personas con discapacidad".

Los afectados (también se quejan porque no se contemplan enganches al gas), dicen que una alternativa que ofrece Castellano es hacer una rampa y acortar el diámetro de las escaleras, fórmula semejante a la de otras calles como Alzapiernas o Casas de Cotallo, algo que no les convence porque "en la parte antigua --sostienen-- eso es una chapuza". Por su parte, el presidente vecinal destacó la disponibilidad municipal de "tener muy en cuenta la propuesta de los vecinos".