El plazo para la presentación de alegaciones a la segunda fase del proyecto de encauzamiento integral de la Ribera del Marco finalizó el miércoles. Se han presentado más de medio centenar entre las entregadas por colectivos y particulares, según estimó ayer Manuel Santiago, portavoz de la Plataforma Ciudadana para la Defensa de la Ribera del Marco. Santiago insistió en que se quiere la mejora de la Ribera, pero con una solución "más respetuosa", y expresó su temor a que a la intervención de mejora de las infraestructuras sigan otras "con intereses inmobiliarios".

CINCO EJES Las alegaciones se fundamentan en cinco ejes: la preservación de las huertas, la defensa del patrimonio cultural, la repercusión medioambiental, el incumplimiento de la Ley de Accesibilidad y la necesidad de dar información sobre la totalidad del proyecto de encauzamiento, que tiene cinco fases.

El portavoz subrayó que el objetivo de la plataforma "no es sólo criticar", y anunció que se "saldrá a la calle para difundir los valores de la ribera". El presupuesto de la segunda fase es de 5,6 millones, y se actúa en el tramo comprendido entre el puente de los Hortelanos y la N-521, donde se crea un parque y paseos y se desplaza el colector.