La portavoz socialista en el Ayuntamiento de Cáceres, Carmen Heras, estima que el problema de la movida en la ciudad no es de la Junta sino del equipo de gobierno municipal, a quien reclamó mayor control sobre las licencias de los bares. A juicio de Heras el fallo no está en el horario sino en los permisos. La líder socialista añadió que si existen desórdenes en las calles lo que debe haber "es una policía local que los controle". Y reiteró: "Los bares hay que tenerlos regulados conforme a la licencia y si se produce alguna situación hay una policía local y no hay que darle más vueltas porque este tema está más visto que el tebeo".

También aseguró que los jóvenes no tienen culpa del desorden porque los horarios son iguales para toda Extremadura y solamente en Cáceres se producen los problemas. "Creo que no hay que echar balones fuera", sentenció la portavoz socialista.

Por su parte, el líder de Izquierda Unida, Santiago Pavón, se refirió a la necesidad de construir centros de ocio en la ciudad. Pavón criticó la ley antibotellón, que definió como "una ley seca más bien" y un Rodríguez Ibarra, aseguró, "ejerciendo de Eliot Ness de la dehesa". Estimó que ni la Junta de Extremadura ni el ayuntamiento son capaces de conciliar el derecho al ocio con el derecho al descanso. "Sólo tenemos una ley aprobada por el gobierno socialistas en plan Marshall y a nuestros alcaldes ejerciendo en plan sheriff", ironizó.