Felisa Rodríguez Morán es una devota de la Virgen de la Montaña, a quien siempre le dedica sus mejores canciones. Empezó a cantar con sólo 4 años y desde entonces no ha parado de trabajar. Reconoce que Dios le ha dado un gran don, y que, aunque nunca ha ido a una academia, los escenarios de los pueblos han sido su gran escuela.

¿Qué planes tiene para estas vacaciones?

--No voy a tener descanso. El humorista Franquete y yo vamos con nuestro espectáculo por los pueblos extremeños, que siempre nos reciben con los brazos abiertos. Viene también mi marido para montar el equipo porque, además, es mi manager. Yo canto canción española, pero puedo arrancarme por cualquier estilo. Intento averiguar de donde es la gente para sorprenderles con música de su tierra.

¿Con qué canción consigue seducir al público?

--Con Felisa la cantaora . Es una canción compuesta por mí y que cuenta mi vida, aunque yo siempre canto lo que me piden.

¿Tiene alguna figura a la que admire en la canción?

--A Mari Salas que fue mi gran maestra. Lamentablemente, murió joven. En mi familia mi abuelo fue el que me inculcó el amor por la música, y mi nieta de 9 años va a seguir mis pasos.