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Fax: 927 620 626. E-mail: epextremaduraelperiodico.comLa carga y descarga de mercancías para los comerciantes de las calles Donoso Cortés y Roso de Luna se ha convertido en una odisea. Así lo describen los empresarios de este eje comercial que piden al ayuntamiento que les permita el acceso por esta calle cuando necesiten descargar, como hacen otros servicios como Prosegur, la lavandería del hotel Don Carlos y sus alojados.Los comerciantes llevan denunciando esta situación desde que se peatonalizara la zona, aunque el ayuntamiento ha hecho "caso omiso" a sus quejas. En septiembre llevaron varios escritos que no ha respondido.BUSCARSE LA VIDA "Lo único que te dicen es que te busques la vida", denuncia Pepe Cantero, de La Despensa Cacereña. "Incluso algún policía --añade-- parece que te va a pegar por el interfono de Roso de Luna". El problema es que gran parte de la mercancía que venden la descargan ellos mismos desde sus coches particulares o con taxis. Por ello, no pueden usar las áreas de carga y descarga ni acceder con sus vehículos al no ser residentes."La solución que me dan --explica Pilar Pérez, de Modas Jade-- es que me compre una carretilla, pero muchas veces vengo con la mercancía en taxi. A veces, el taxista se arriesga y llega a la tienda marcha atrás desde San Juan para hacerme un favor".Modas Andiria, en Donoso Cortés, o Marquetería Palacios, en Roso de Luna, sufren el mismo problema. "Cuando llegamos cargados --relata la dueña de Andiria--, intentamos que nos dejen pasar, aprovechamos los domingos que no hay nadie, pero nos niegan el permiso. Es cuestión de minutos, descargar y volver a salir, pero nada".José Antonio Agudelo, de Artipiel y gerente de Nevasa, dice que Artipiel utiliza empresas de reparto, pero que hasta la distribución de butano tiene las mismas dificultades.