Heredero de una firma pastelera creada en 1880, La Salmantina , decana del sector en la ciudad, Jacinto García lo ha sido todo en la repostería cacereña. Formado en media España, ha introducido numerosas novedades año tras año, desde la croissantería, los salados y el catering hasta los patés, fiambres, quesos de importación, un salón de té, la elaboración de productos con nata, los helados artesanos y hasta el San Marcos . Durante la feria ha recibido el premio Caldero de Honor , concedido por la Asociación Extremeña de Cocineros y Reposteros.

--Si hasta su familia creó una tarta para una infanta...

--Sí, fue en 1917, en Candelario. Unos señores encargaron a mi abuelo una tarta porque habían invitado a merendar a la infanta Isabel, La Chata . La bautizó como Sopa de Reina y la hemos vendido hasta mi jubilación. De hecho, acabo de hacerla para la cena de gala de la feria.

--Lo curioso es que usted no iba precisamente para repostero...

--Quería ser actor, y hasta un profesor de 7º de Bachillerato le pidió a mi padre que me enviara al Conservatorio de Arte Dramático. Pero yo debía ayudar al negocio, acabé como repostero y lo he disfrutado, aunque seguí en grupos teatrales. Ahora estoy con la Compañía Lírica Extremeña.

--Y tras 60 años, le premian sus colegas, no hay mejor postre...

--Estoy profundamente agradecido, me siento muy satisfecho.

--¿Ha tenido una vida de dulce?

--La vida siempre es dulce, y aunque incluye sus momentos amargos, no hay que dejarse llevar por las preocupaciones ni las maldades. El almíbar de la vida es simplemente vivirla.

-- Venga, sincérese..., ¿hace el postre los domingos en casa o abre la lata de melocotón?

--Sí que hago cosillas, las tartas de cumpleaños, los turrones y mazapanes en Navidad, los helados, algunos postres...

--Cáceres logra la capitalidad y el 2016 se abre con una cena que preside el Rey. Usted debe poner el postre... ¿Cuál?

--Sin duda, Sopa de Reina .