En 1995, el entonces Ministerio de Cultura dio luz verde a la reforma del Museo de Cáceres entendiendo que era necesaria por sus deficiencias. Veintidós años después se han iniciado los trámites decisivos para hacerla por fin posible. Tras la entrega de los proyectos básico y definitivo por parte de los arquitectos, se ha celebrado una reunión más que significativa, esperada desde hace años, que supone la entrada en la recta final hacia las obras.

En ella se pusieron sobre la mesa los trámites, los plazos, el vaciado del museo, los traslados y otras cuestiones inminentes. Se determinó, como dato importante, que las obras comenzarán en 2019 y tendrán una duración de 30 meses, tiempo necesario para poner a punto el Palacio de las Veletas y la Casa de los Caballos, ambos edificios del siglo XVI que integran el museo, así como el pabellón anexo que se utiliza como taller de restauraciones.

«El proyecto arquitectónico ya está siendo revisado por el Ministerio de Cultura. Tendrá que presentarse ante la comisión de seguimiento del Plan Especial del ayuntamiento para recabar su visto bueno, y posteriormente ante la Comisión Provincial de Bienes Inmuebles, al tratarse de un edificio situado en la Ciudad Monumental y catalogado como Bien de Interés Cultural. Una vez logradas ambas aprobaciones, se pedirá la licencia de obras», explica el director del museo, Juan Valadés, satisfecho con poder esbozar por fin los trámites que se sucederán en los próximos meses.

Mientras tanto, el ministerio está trabajando en la redacción de los pliegos necesarios para sacar las obras a licitación a finales de año. Al mismo tiempo, el propio Museo de Cáceres irá preparando el proyecto museográfico, que será objeto de un contrato posterior en paralelo con el desarrollo de las obras. Dicho proyecto determinará cómo quedará la exposición permanente y la dotación de mobiliario. «Ya están seleccionadas todas las unidades temáticas que tendrá el museo, e incluso los textos, los recursos audiovisuales, las piezas que se van a mostrar, las vitrinas, etc...», desvela Juan Valadés.

Además, el personal del museo irá preparando estos meses el vaciado de los edificios y el traslado de miles de objetos fechados desde hace 350.000 años. Empezarán por la Casa de los Caballos (primeros nueve meses de obras), que una vez lista albergará las oficinas técnicas y administrativas del Palacio de las Veletas, que a su vez se vaciará y rehabilitará.

En la reunión estuvieron presentes el subdirector general de Museos Estatales, Miguel González, el director general de Patrimonio Cultural de la Junta, Francisco Pérez Urban, el director del Museo de Cáceres, técnicos del ministerio y diversos responsables de la Junta. «Ahora sí podemos decir que el proceso está en marcha», afirma el director del museo, que lleva años aguardando una reforma realmente necesaria.

LAS MEJORAS / El Museo de Cáceres cumplió su centenario en 2017 y es el recinto más visitado de la ciudad: unas 150.000 personas al año. Las obras eliminarán todas las barreras y arreglarán la cubierta para solucionar las humedades, que afectan también a la fachada de la plaza de las Veletas. Paralelamente hay que instalar un sistema adecuado de climatización, puesto que las piezas necesitan condiciones estables de temperatura que ahora no se dan. El proyecto incluye un nuevo núcleo de comunicaciones en el jardín para pasar directamente de las Veletas a la Casa de los Caballos y recuperar este espacio. También se habilitará un sistema correcto de evacuación, se cambiarán suelos y se llevará a cabo una profunda limpieza del aljibe (siglos XI-XII), que podrá ser visto desde las ventanas por quienes tengan alguna discapacidad.

El contenido responderá a un museo del siglo XXI. Se cambiará su organización para dar más garra al discurso expositivo, y se incorporarán recursos tecnológicos y audiovisuales (pantallas, audioguías...) sin restar protagonismo a los propios fondos.