El oficial de la Unidad Operativa de la Policía Local de Cáceres condenado la semana pasada por la Audiencia Provincial a siete meses y quince días de prisión e inhabilitación por un delito de amenazas al dueño de un taller, ha recurrido el fallo judicial ante el Tribunal Supremo, según confirmaron a este diario fuentes judiciales.

Este recurso de casación paraliza automáticamente la ejecución de la sentencia y también el expediente disciplinario que el ayuntamiento debería incoar contra el mando policial tras ser condenado por un delito. El concejal responsable del área, Carlos Jurado, ya anunció que no se iniciaría ningún proceso hasta que la sentencia no fuera firme. Eso no ocurrirá hasta que el Tribunal Supremo resuelva este recurso de casación, tras lo cual el mando policial podría resultar absuelto.

El oficial fue procesado junto a otros dos agentes del cuerpo municipal por un delito de amenazas, coacciones y prevaricación. Sin embargo, los dos agentes fueron absueltos y el mando únicamente fue condenado por el delito de amenazas al no demostrarse que los tres urdieron un plan para perjudicar al propietario del taller retirándole unos vehículos de la vía pública como venganza por no haber logrado adquirir una furgoneta.