Doscientos años después de que se inaugurase, los restos que todavía se conservan de lo que un día fue el teatro Principal corren el riesgo de perderse, según la advertencia hecha ayer ante el pleno por el edil del grupo socialista Miguel Hurtado. Lo que aún queda está oculto en la manzana que comunica la calle Peñas con la plaza de Canterías. Casi todo se encuentra dentro de una vieja panadería, donde está la cubierta del espacio escénico, el escenario, la bóveda de los camerinos, el acceso de los camerinos al escenario y algunas de las columnas que sujetaban los palcos.

Hurtado pidió ayer que "antes de que se derribe, se realice una investigación por si ese espacio se puede rehabilitar". La normativa urbanística permite intervenir en la manzana, que no tiene protección. Sí la tuvo cuando en 1990 se aprobó el plan especial de revitalización del casco viejo, aunque años después se retiró. "Se hizo un estudio, y se levantó la protección que tuvo en su momento", explicó ayer Raúl Salgado, gerente de Prinsa, que es la empresa que promoverá la actuación urbanística prevista en la plaza de las Canterías y que afectaría al solar de la panadería.

UN NUEVO ESTUDIO Salgado subrayó que "antes de cualquier intervención se realizará un estudio, y si existen restos del antiguo teatro a conservar o a recuperar, se protegerán". Prinsa es propietaria de varios de los inmuebles de la manzana, y desde el mes de octubre tiene licencia del consistorio para derribar dos de las casas que dan a Canterías, una demolición que ya se ha iniciado. La intención de Prinsa es acogerse a la figura del agente edificador, regulada en la Ley del Suelo de Extremadura y que permite a un promotor, aunque no sea dueño de la totalidad de las propiedades, actuar en solares abandonados para regenerar la zona donde se interviene. El gerente de Prinsa apuntó que las dos casas que se están tirando no tienen ningún tipo de protección ni restos del antiguo teatro.

Hurtado recordó que la manzana quedó sin protección a raíz de una alegación presentada al plan general de urbanismo. La norma urbanística permite que en esta zona se puedan hacer edificaciones de tres plantas.

Esta no es la primera intervención en la zona. Hace cinco años se modificó el plan especial, la protección pasó de estructural a ambiental, para realizar una actuación urbanística en la calle Luis Grande esquina con la plaza de las Canterías. Entonces, tanto el colegio de Arquitectos como Adenex advirtieron en sus alegaciones que era necesario aclarar si la modificación del plan que proponía Progemisa afectaría a los restos del teatro Principal.

En otros asuntos, el alcalde se mostró a favor de que la revisión del plan de urbanismo dé viabilidad al quiosco Avelina en Calvo Sotelo, que, de momento, tiene suspendida la licencia.