Un vecino de Casar de Cáceres, J. A. M. C., ha sido condenado a nueve meses de prisión por haber robado a su mujer 20 euros el 9 de marzo del 2007.

El juez de lo Penal de Cáceres considera probado que el acusado pidió dinero a su mujer ese día y que ella se negó a dárselo. Ante la negativa, el hombre recurrió a la violencia colocando su brazo sobre el cuello de su mujer para quitarle el dinero.

La mujer declaró en el juicio que cuando sucedieron los hechos su marido estaba "con el mono", ya que el condenado era consumidor habitual de drogas. A pesar de que la pareja mantenía buenas relaciones en el momento de celebrarse el juicio y que la mujer intentó restar importancia a la violencia durante el robo, la sentencia concluye que hubo violencia y condena al acusado a esos nueve meses de prisión y a la obligación de someterse a tratamiento contra su adicción a las drogas.